La gente nota cuánto fumo.
Dos cajetillas diarias, por lo menos.
Es que el abrigo absorbe ese olor.
El tabaco observa las noches
sin yo pegar los ojos, mis juegos con el humo.
Acabo de gritar como una gata
sobre el tejado caliente. Me da pánico
sentirme tan diftérico, pensar que ni Dios
quiere mi cuerpo, y ¿qué derecho tengo a levantar
mi mano si soy como esa loca heroína,
sola, enferma, refugiada en el rezo?
¿Quién le pegaría al padre por odiar
un dios que no te grita tanto, que te golpea
con silencio, por qué abrir el cráneo de Rose
y sacar un fantasma, si la flaca es linda
y no mata una mosca? Es simplemente
esquiza, paranoica, pobre hermana...
A veces, por estas calles de Nueva York,
siento otros miedos que no sentí en New Orleans.
¿Qué tal si la mente me engaña con el Cairo
o los chinos del barrio se mudan a Shangai?
No digan que no admito compromisos.
No soy el rebelde, marginado
que discuten... ni un marica amanerado para que
vengan cinco adolescentes, en homofóbica bola,
a herirme, a golpearme... yo, realmente,
no vivo tan atormentado. Tengo a Merlo,
que me inspira, a Moisa y el mundo de la razón
y si faltara, por desgaste, mi homosexualismo.
Mi único rival, ¿se los digo? ... la hipocresía.
El cigarro que me da guerra tan obsesivamente.
El licor que a veces me encañona.
Las pastllas de seconal. Mis calmantes a menudo.
El mundo quiere demostrar que yo soy un solitario
y que no me quiere nadie. Ni uno. Falso.
Cierto. A menudo recuerdo a una niña hermosa,
mi romance en Provincetown. Tan bella como Vivien Leigh
o Anna Magnani. Como amigo, Frank Merlo me basta.
Elia Kazan, también amigo.
La timidez se me quita con un par de copas.
Entonces, mis ojos pueden que vean más
que en los veranos raros, últimos veranos,
o tras cristales zoológicos de lobotomías.
Mire, yo voy a donde me da la gana.
A veces quiero conocer a otros; otras veces
que nadie me conozca. Simone de Beauvoir,
es glacial como hielo, y yo la quise conocer.
A Sartre lo temí, me dijeron ve a él y ódialo
y siento que es amable como un santo
siendo ateo, duro como la muerte
y la depresión y la náusea.
En la piscina del Hotel Nacional,
allá en La Habana, en un principio avergonzado
por acercarme a ellos, fue con quien simpaticé.
Usted no crea que Hemingway es
ese supermacho apabullador y malhablado.
Uno que imaginé, esbozando una pieza teatral
o una novela. No, a quien conocí en el Floridita
de La Habana, fue todo lo contrario: un caballero,
un hombre dotado de mi propia timidez.
La suya tan enternecedora...
Hace unos minutos, cuando buscaba una pastilla,
algo que tranquilizara a mi multitud de recuerdos,
me hallé con mI muerte tan estúpida y mira,
ahora vuelo sobre mi cadáver y veo a quien fui
(ya sin bigote, flaco, envejecido), 70 años, carajo,
ya atragantado con la tapa de un frasco
[torpe que soy, abriendo cosas con la boca,
por cegato]. En la habitación del hotel,
lleno de pánico grité como un gato
sobre el tejado de zinc frío, pero dejé de respirar.
08-09-2005 / El libro de la guerra
___
Heideggerianas: Indice / Cuaderno de amor a Haití / LA NARANJA / Blog político / El pueblo en sombras: Indice / Dossier de Carlos López Dzur / Codornos y coscuros
* * *
/
Sunday, November 30, 2008
Tennessee Williams observa su muerte
Cervantes, héroe de Lepanto
De veras triste estoy con dolor en la boca.
Masticar es tormento. Sosa la sopa.
Seis dientes no encajan entre sí
y sólo tengo seis dientes y la barba
de plata que fue de oro en antaño
cuando yo era un hombre
firme en dos pies y en dos brazos.
En antaño, yo pienso que fui heroico
y mi mano se llamaba voluntad
y el tiempo me parecía hasta eterno,
hoy sin mis dientes, todo me duele,
la barba blanca, el muñón de mi brazo,
la soledad, la nostalgia, todo
me duele, todo.
08-09-2005 / El libro de la guerra
____
Heideggerianas: Indice / Cuaderno de amor a Haití / LA NARANJA / Blog político / El pueblo en sombras: Indice / Dossier de Carlos López Dzur / Codornos y coscuros
Saturday, November 29, 2008
Kalenjines vs. Kikuyus
Fear and distrust now run deep in many Kenyans.
Memories of rapes, mutilations and brutal deaths
are still raw, even for those not directly touched
by the violence: Peter Kimeu
Llamaríamos Vecinos míos a los kikuyus,
aldeanos todos de Eldoret si no jugaran
su carta divisoria, su complicidad
con fuerzas de la élite.
Nosotros, campesinos kalenjines,
ya no podemos. Han colmado la copa
de nuestra paciencia. Dos centenares de muertos
se hallaron en la mezquita de Masalaci.
En calles aledañas, más cadáveres.
Y son nuestros hausas, musulmanes,
partidarios de Odinga... y el que ha vencido,
sospechosamente, en estas elecciones del apaño,
sirve al viejo, conocido orden de ayuda y dependencia
que ha perpetuado al Africa en el hambre.
A tal comunidad la conocemos.
Sabemos con quién se ha alíado. Y lo que quiere.
A la postre, quitarnos las tierras y sofocar
a quienes llaman con desprecio Maasai warriors
/ guerrilleros / islámicos...
Ya no podemos creer a esos cristianos...
En el fondo, repudian la limpia democracia.
Se aprovechan de falsas elecciones
y salen a matarnos como la Gran Derecha
jactanciosa, crecida, con el ejército oficial dispuesto
a echarnos balas. Calculan que sus ayudantías serán
garantizadas. La prensa los llama víctimas.
Los vende al mundo como unas pobres almas
del Africa salvaje, reacia a instituciones asentadas,
al cristianismo, a la presencia de los civilizados...
Por eso en Kenia se repite este brote de desdicha:
Van 1,500 muertos en par de días y los kikuyus
aplauden el robo eleccionario: Fue relecto Kibaki,
Presidente. Esperan más venganzas.
Las tribus Luos y Luhyas están molestas.
Queman, para descrédito del nombre Odinga,
las mezquitas este fin de noviembre.
Recuerdan, con discursos / portafolios de deudas,
recursos que van a las fortunas personales
de quienes saben gestionarse el influjo masivo
de donativos internacionales. Propietarios,
comerciantes, políticos y esbirros.
Aún más. Salen a matar. Queman mezquitas.
Y no se quedará ninguno con brazos cruzados.
No puede hacerlo ni aún Raila Odinga, opositor
de Kibaki, si no se cumple con la reforma agraria
que a todos los contente,
si no sacan del panorama tan corrupto
a las familias políticas ladronas, a ministros,
a jueces, funcionarios del gobierno,
con intereses en las tierras en disputa.
Los ladrones, políticos corruptos,
como siempre, aducen que es limpieza étnica.
Un africano contrapuesto que no admite
la existencia del vecino. Puede que sea que en Kenia
somos tan tribales y sea cierto de Nairobi
al Valle de Rift, de Olmelil al Edoret.
Puede que sea que el Africa
no entiende el por qué 15 millones de su gente
muere cada año. Tal vez sea el miedo ancestral
al hambre, a la violencia y la muerte.
Pero no. Son esos ladrones, grandes ministros,
con pretextos tan de suyo manipuladores.
Dicen que Raila Odinga aboga por la Kenia musulmana.
Que es un talibán siquitrillado y que hará
a cuarenta grupos étnicos o más que Kenia tiene
menos diversos, más violentos, limpios de polvo y paja.
Pero, veamos, dizque este noviembre nos peleamos
por lo que no ha sido nuestro: la religión del blanco,
maniobras de funcionarios ladrones que profesan
la fe de los berones, cristianos y kikuyos.
Entonces, con impaciencia de estampida,
se abadonaron los hogares de la aldea, nos metimos
en edificios estatales, pedimos los sagrados cobijos
de iglesias y mezquitas... y aún así, incendiamos
a nuestro paso cuanto vimos. Nos quemamos vivos...
por dos días, gritando por el Dios que nos salve,
o el Alá que nos bendiga.
¿Y qué piensan o que dicen 7,000 personas
que han abandonado sus hogares si a todo
lo han llamado Nuestra Etnia, el grupo prioritario?
Que simplemente tienen miedo: son ancianos,
niños, mujeres que temen al ultraje...
Son quienes nada deben; porque siempre
es un grupillo sectario el que es favorecido
del partido cleptocrático y le sirve
de turba, de avanzada al que roba
y no admite democracia ni tolerancia
que no sea otra que la definida en Occidente
y por eso venció Mwai Kibaki y el ODM se llenó de rabia
y defendió sus mezquitas y pagó después
con la misma moneda.
Y dicen que no se sabe dialogar
sino con sed de sangre. Por eso en Eldoret
como antes en Jos, nos matamos.
El kikuyo no quiere al kelenjin y éste quiere
que se vayan los siervos infieles de sus campos
porque los Hausas odian la banda de berones.
Para ellos, el peonaje extraño, han sido las carpas.
Las grandes protecciones. El alimento, la guardia,
la oferta de préstamos, la Iglesia consolante, Caritas,
el dinero humanitario de los americanos y la ONU.
Es que son excelentes comerciantes.
Y excelentes turbas. Y excelentes reaccionarios.
La derecha contra el más pobre. Los kikuyos.
Sí, la gente que con que Occidente manipula
el Africa y la divide, el rival del islámico,
que ha enseñado las uñas y sabe que las elecciones
son altamente fraudulentas, pero desean creer
que Odinga no será bueno para el pueblo kikuyo.
10-10-2008 / El libro de la guerra
__
Despite Power-Sharing Accord, Ethnic Division in Kenya Runs Deep / Dossier de Carlos López Dzur/ Codornos y coscuros
* * *
/
Para menospreciarte
Nadie tiene la verdad completa: la racionalidad humana
no permite conocer todo en un solo acto; hay que ir viendo
los aspectos desde las distintas perspectivas.
Jesús García Álvarez, escritor español
Te voy a pasar la cuenta. No protestes.
Algo me debes: ¿crees que tienes la verdad?
Pues no. No la tienes y por eso hablas
de tu vida sufrida, de explotadores que te coartan,
de identidad y seguridad no conseguida.
El pobre es quien siempre debe algo.
Debe, en primer lugar, el ser inadecuado,
la carencia de verdad en su vida.
No saben ser felices y pretenden
evitar el sufrimiento ajeno,
desmontar tiranías y opresiones.
Los débiles dan mal imagen a mi mundo.
Carecen de los mínimos fundamentos
y quieren ser intolerantes con quien le pide cuentas
y le pasa un adeudo, su factura.
Es que viven y, seguramente, no merecen la vida.
Se confiesan débiles, inseguros y lo son.
No por algo quieren tolerancia, aunque sean
violentos, cáfila canalla, jauría.
El mundo por su causa es este drama mediocre.
Un perpetuado lirismo de culpa. Un lamento
dizque que por la identidad amenazada.
Juntos lloran, juntos callan, juntos son cómplices.
¿Pero qué identidad pudieras tener tú,
guevón, vives aunque no lo sepas
en vacío identitario: tu única vivencia
es la insuficiencia? Es más, eres la causa
de la violencia sufrida; eres el que inspira
la violencia impuesta. El que es fuerte
es quien te pone a raya y cobra la deuda
que tienes con la sociedad. Tú la pagas
porque la pagas. Para eso estamos
los que te despreciamos, iluso pordiosero.
Te voy a pasar la cuenta. No protestes.
Es nuestra obligación. Manejamos verdades
que tú no manejas... Ni como copión estás
a nuestra altura. Lo más temible a que llegas
es parecerte al payaso fundamentalista.
Y cuando más sabroso te imaginas,
terrorista, es más terrorista el terror nuestro
porque somos el Estado y su élite, superiores
en el arte de tejerte las redes de captura
y somos la araña venenosa y tú el insecto
atrapado en la urdimbrada. Tú, telarañado.
¿Cómo que tu misión, o tu humanismo,
es luchar por el fin de la injusticia?
Tú creas la injusticia, eres tú el que debes,
el que revientas las arcas cuando hay crearte
cárceles, el castigo, las armas con que peleas,
con que tú mismo te hieres. Siempre eres
el que dices SI a la guerra y a la cárcel,
el que delinques y das motivos a verte censurado.
El tonto tentado. El autodestructivo.
¿Para qué quieres libertad, si bueno eres para nada?
Querrás de seguro reproducirte como el bicho malo,
y joder los equilibrios ecológicos
con tu indisciplina, tus feroces deseos,
tu monstruoso miedo a lo que desconoces.
Es mejor que sepas que el bienestar material
casi nunca visita la casa del imbécil.
Has nacido para depender de quien te pasa
el débito, una factura que enseña, poco a poco,
a que te disciplines. Tenemos el derecho
a sujetarte a la ley del Pez Grande
y a que te coma. Tú eres el insignificante.
¿Qué eres motor de la historia, semilla airada
del cambio revolucionario? No me hagas reir.
En la épica de luchar y morir no hay mérito alguno.
Es otra forma de tu vocación para el desgaste,
otro matiz de inseguridad, de carencia de valor,
un no saber vivir a la altura del individualismo.
El poder no se comparte y si tienes poder,
invocado por deseos colectivos, adeudas tú
ese poder que aún no robas al Estado.
Si temerario, oh atrevido, estás a punto de cometer
un crimen que, de seguro, nadie va a perdonarte.
Dices que tienes un pueblo por apoyo.
No. La masa será la que te cuelgue de los güevos.
No es dable para tí distribuir lo que no es tuyo.
Lo primero que no te pertenece es la totalidad
del mundo; si así fuera, serías uno de los nuestros
y no lo eres. Eres un deudor del Tercer Mundo.
08-12-2002 / El libro de la guerra
__
Index 1 / Yo soy la Muerte / poemario completo / Indice: Tripod / De lo ilusorio y kármico: Tantralia 5 / Los poderes sensibles: Tantralia / Index / La paradoja del Wild West / poema / Index / Exactpages / Zoomblog /
* * *
/
La falsa haganá
Baruch atta Adonai, Eloheinu melech ha-olam, borei p'ri ha-gafen.
Baruch attah Adonai, Eloheinu melech ha-olam, asher bachar
banu mikol am, v'rom'manu mikol lashon, v'kid'shanu b'mitzvotav.
Bendito eres Tú, oh Señor, nuestro Dios, Rey del universo,
quien ha mantenido nuestras vidas, nos ha sostenido
y nos ha permitido llegar hasta este tiempo:
Oración judía: Kiddush de la primera copa de vino
... porque yo creo en Teth, en la novena esfera,
en la serpiente misteriosa de las llamas
que se irradian del rostro de un Dios vivo,
porque creo en la Zarza Ardiente y en la Voz
que en el Monte Moriah me dice:
«Detén el hacha; tu fe es probada»,
los judíos me piden: Canta la bendición
del She'he'cheyanu, de Quien te ha traído
a la historia, a estos residuos de las edades
aún marchitos por el dolor, y canta los milagros
en el Valle del Beth Shalom,
porque creo en el Vino del Gozo
y que el alimento de Pesaj, eres Tú, Quien me traes
a Sión Terrestre y me lavas las manos en la tierra verde
de la primavera, los sionistas me convocan
con su levadura, me dan de su pan de aflicción
y me dicen: «Esta es tu causa»,
y abren la falsa puerta de Dalet
y un plan cuyo objetivo primordial es
la continuidad territorial de mi futuro
y un Estado ensagrentado que me devuelve
el hacha y me pide mata, mata
y me lleva a ciudades de Tiberíades, Haifa,
Safed, Beit She'an, Jaffa y Acre, me exhorta
provoca y mata y veo la huída de los árabes
que allí habitaron y me dijeron: Hermano mío,
mi primo en la paz de Shalom.
Es que dejaron de creer quienes amaron
a Roma y se dijeron hijos de la Zarza ardiente.
Jerusalén se ha endurecido en Palestina
y olvidó cómo convivir con el vecino.
Y nos ha nacido el tentador: se trajo el hacha,
el tentado, hermano mío,
el que huyó de los progromos rusos.
... porque ya no se quiere ser manso
ni se cree en la Zarza ni se canta
la bendición del She'he'cheyanu...
... porque yo canto a la paz del HaHagana,
la defensa de mi Dios vivo, el tentador llegaría.
Son cristianos que se arman con su generalazos
y el sionismo montado en las guerrillas.
El falangismo. Likud.
Baruch attah Adonai, Eloheinu melech ha-olam, asher bachar
banu mikol am, v'rom'manu mikol lashon, v'kid'shanu b'mitzvotav.
Bendito eres Tú, oh Señor, nuestro Dios, Rey del universo,
quien ha mantenido nuestras vidas, nos ha sostenido
y nos ha permitido llegar hasta este tiempo:
Oración judía: Kiddush de la primera copa de vino
... porque yo creo en Teth, en la novena esfera,
en la serpiente misteriosa de las llamas
que se irradian del rostro de un Dios vivo,
porque creo en la Zarza Ardiente y en la Voz
que en el Monte Moriah me dice:
«Detén el hacha; tu fe es probada»,
los judíos me piden: Canta la bendición
del She'he'cheyanu, de Quien te ha traído
a la historia, a estos residuos de las edades
aún marchitos por el dolor, y canta los milagros
en el Valle del Beth Shalom,
porque creo en el Vino del Gozo
y que el alimento de Pesaj, eres Tú, Quien me traes
a Sión Terrestre y me lavas las manos en la tierra verde
de la primavera, los sionistas me convocan
con su levadura, me dan de su pan de aflicción
y me dicen: «Esta es tu causa»,
y abren la falsa puerta de Dalet
y un plan cuyo objetivo primordial es
la continuidad territorial de mi futuro
y un Estado ensagrentado que me devuelve
el hacha y me pide mata, mata
y me lleva a ciudades de Tiberíades, Haifa,
Safed, Beit She'an, Jaffa y Acre, me exhorta
provoca y mata y veo la huída de los árabes
que allí habitaron y me dijeron: Hermano mío,
mi primo en la paz de Shalom.
Es que dejaron de creer quienes amaron
a Roma y se dijeron hijos de la Zarza ardiente.
Jerusalén se ha endurecido en Palestina
y olvidó cómo convivir con el vecino.
Y nos ha nacido el tentador: se trajo el hacha,
el tentado, hermano mío,
el que huyó de los progromos rusos.
... porque ya no se quiere ser manso
ni se cree en la Zarza ni se canta
la bendición del She'he'cheyanu...
... porque yo canto a la paz del HaHagana,
la defensa de mi Dios vivo, el tentador llegaría.
Son cristianos que se arman con su generalazos
y el sionismo montado en las guerrillas.
El falangismo. Likud.
Con Orde Charles Wingate, siervo impío
de intereses imperiales, petroleros de Londres,
derramarán más sangre y tú eres el pretexto,
judío, tú... la causa apostasiada para que lucren
los reyes británicos en Africa y en el Mandato
de la Palestina. Ahora la profecía será cumplida
por tal lectura de la historia que no tiene
el pan limpio ni el vino del gozo,
sino la marrana nomenclatura de las inteligencias
de la Bestia de los British-led Jewish commandos.
A los niños se les hará en vez de escuelas
de paz y reposo para el sábado... talleres caseros
de granadas y explosivos de mano...
y Archibald Wavell ha de ser el falso sacerdote
y Wingate, la voz detrás del Haganah armado.
Nos están dando el hacha que Eloheinu
melech ha-olam, el Rey del Universo,
nos quitó de la mano en el Moriah.
Nos forjan como homicidas, sin hijo de la risa,
sin pan de regocijo. Y el vino es el petróleo
de los árabes y se ríen del dolor
los reyes del Imperio Británico.
El hermanastro de Abdullah, Faysal,
en el trono de Iraq, es colocado por ellos...
¿Qué me dirás ahora, padre Avraham,
si en vez de maderas y leña para mi sacrificio
se me llama a fabricar fusiles y granadas de mano?
¿Qué me dirás, Dios de provisión,
donde nace crisis y luto, urdida por rivales y jacales,
no consagración y adoración para mi gozo.
... porque creo en el Único, Kadosh,
en el Santo y Separado de la paz de mi espíritu,
te bendigo, Ruaj, y desde el monte de HaShem
pido que sea provista tu palabra: «Detén el hacha;
tu fe es probada, hijo mío», y que Egipto
sea libre, como yo lo fui, por tu gracia,
de Egipto y que sea libre el Líbano
y que Inglaterra y Francia se vayan de nuestras vidas.
Detén, oh Kadosh, el colonialismo.
Deja al sirio en libertad, Francia.
Deja a mi pueblo libre, Inglaterra.
No ataques a Jerusalén ni Deir Yassin, judío.
Suelta el hacha, guerrero de Irgún y Lehi.
Sepárate de FOSH y HISH, israelita,
Desbanda al Irgún Tzevaí Leumí. Etzel es la vileza
de las tentaciones; Herut, la herencia sionista
de Jabotinsky, Beguin y Ariel Sharón,
el invasor del Líbano. Likud, nuestro desastre.
Líbranos de la Mano del Gran Muftí de Jerusalén
que es la sede del odio que nos viene;
ahuyenta el hacha del Consejo Supremo Musulmán.
No nos hagas perros de nadie porque no lo fuimos
antes de que llegaran transjordanos a nuestras vidas
y armas de Checoslovaquia y ofertas
de títeres coloniales de falso haganá.
Sepáranos otra vez en tu monte Moriah,
Aléjanos de los cristiano-falangistas
que se alían a Israel para llenarnos de sangre
y masacrar a vecinos que, a la postre, enriquecen
con las ventas de armas a Michael Nassar.
... yo te ví en el perdón, Dios de Avraham.
Detuviste la mano homicida de mi padre,
pero a orillas del monte hay
entre 10.000 y 15.000 cadáveres.
Son árabes. Tú me salvaste porque Sión
es espíritu y humildad, pero la tierra
se manchó de sangre y este 19 de septiembre
estoy como si me hubieses comido a puñaladas.
No contiendas conmigo, ay Eloheinu melech ha-olam,
pues cantaré la bendición del She'he'cheyanu.
Es que 460,800 cadáveres en Sabra
y Chatilla es demasiada hecatombe para mí,
tu niño de paz, tu salmista, oh Israel.
... porque yo creo en Teth, en la novena esfera,
en la serpiente misteriosa de las llamas
que se irradian del rostro de un Dios vivo:
Detén el hacha y dáme la verdadera haganá.
19-09-1982 / El libro de la guerra
__
Antología / Invitación a la decapitación / Notas sobre el magisterio en Pepino desde principios del Siglo XIX al XX / Notas sobre el Magisterio: Parte 2 / Teth / Teth / 2 / Teth / 3 / Teth / en VozAlMundo / Teth / 4 / Teth / 5 / Ven a mí, Moab / Tiferet / Tantralia / Primera parte: Devoción / Prajnaparamita / Etica / Tercera parte: Los tres cuerpos (kayas) del Sambhoga / Leyendas y Cuentos coloraos: Indice / Indice / Colaboraciones / Indice: Cuentos / Convocatoria al Estudio de la Historia Pepiniana / Objetivo estratégico / Vendrá tu hija, la reina de los muertos / ZoomBlog / Las zonas del carácter / La otra mejilla / Homenaje a Martin Heidegger / Teth, mi serpiente / Memorial Days / Berkeley y yo / Indice: Heideggerianas / La guerra de las causas / Dossier de Carlos López Dzur / Cuaderno de amor a Haití / Codornos y coscuros / ¿Para quién es tu canción? / Charkito / Spanish Poets / Literatos de San Sebastián del Pepino / Radiografía: Pepinianidad / Cartas
* * *
/
Friday, November 28, 2008
La paradoja
Había un hombre que quería ser bueno
y, por verse rodeado de lujuria y violencia,
dejó de sonreir, se mostraba resentido,
y vibraba en ondas de tristeza que originaba,
queriendo o no, gran miedo, recelo,
sospechas, burlas, comentarios malsanos.
El se rodeó de muchos libros, devoró
sin fe algunos que hablaban sobre la esperanza,
y dijo: «A la mierda esos libros».
Descreyó la buena vecindad, las redenciones;
negó todo cuanto es definido ético, lo bueno,
compensante, prefirió, queriendo o no,
lo que insta a rebelarse y endurecer
el alma, ya amaba hasta su propio sufrirse
y, en nombre de los viles hambrientos,
él nunca dio de su pan, ni ofreció un vaso de agua
(él que siempre, pese a pobre, todo lo tuvo
sin ponerse en rodillas, sin mendigarlo a nadie).
Era un hombre acongojado, con muchos aspavientos
de que hay que organizar al pobre,
aunque implique matar los opresores
y torturarlos y decirles sus verdades
con el asco que cultivó después de aplaudir
a los herejes, inconformistas, heterodoxos,
seres quemados, torturados, encumbrados,
linchados o cautivos hasta el último suspiro
y él aplaudía, vivos o muertos,
porque dijo que en los manuales
de matanza, escritos por los subversivos,
estaría la salvación suya y de otros.
Era un hombre con buenas intenciones.
Y le dolía ser incomprendido y no tener credibilidad
en ninguno; pero él nunca dio de su pan
ni siquiera su sonrisa ni su abrazo
y por eso estaba solo, profeta de su desierto.
Su casa, donde murió, fue un legado
de su madre; su ropa, su licor, sus cigarrillos,
siempre fue lo que alguien dio, no su trabajo.
Su vida, ensueño tan constante, se acabaría
y hoy le tocó morir y, como siempre dijo:
«Moriré solo. Nadie me entiende.
Váyanse todos. Nadie me ha amado»
y, sin embargo, fue el pueblo de atorrantes
el que le dio el ataúd, un cura misericordioso
le cerró los ojos, y llegaron campesinos,
pordioseros, vecinos de la aldea
y le dijeron: «Adiós».
Tal vez él mismo creyó
que sólo merecía que se largaran
y no lo hicieron. Llorosamente escuchó
lo que dijeron: «Ha muerto un hombre bueno».
08-12-2000 / El libro de la guerra
__
Index 1 / Index: Carlos López Dzur / Pepino: El pueblo en sombras / Bios / Poesía social / Oralidad de los demonios / La selva oscura / Memorias de la contracultura / Tati: AurasSerenas /
* * *
/
El candidato sospechoso
Sending prisoners overseas to extract information through water torture, removal of toenails and fingernails, beatings, and electrocution at the request of US officials is inhumane and must be stopped: US Congressman Edmund Markey, March 12, 2005
It has been immaterial to the critics that I have been a strong opponent of many of the policies of the Bush administration, such as the preemptive war in Iraq and coercive interrogation tactics, to include waterboarding... The fact that I was not involved in the decision-making process for any of these controversial policies and actions has been ignored: John Brennan, experto en Contraterrorismo
Obama: los torturadores son enfermos patológicos,
criminales, no importa el bando del que vengan. Lo son.
Tu antecesor tiene una mente indulgente, permisiva,
y es uno de ellos. Basta ver en sus ojos y es como ver
a Torquemada. Y Condolezza es su cómplice
y McCain, su compinche.
He sido el observador sin voto. Voz que les dijo
«Yo me opongo». Un combatiente enemigo que lo sea,
si lo es, pero ante evidencia de supervisiones judiciales.
De lo contrario, sólo nos haremos victimarios.
«Ustedes están fortaleciendo al enemigo».
Es la mucha tortura lo que fanatiza los odios
en tantos pueblos árabes. «Yo me opongo».
Pero el país retiene en cárceles, sin cargos formales
y sin juicio, a quienes les da la gana. Es la forma de justificar
ante la prensa sus corillos histéricos: «Este país está
lleno de gandallas; ya no se puede confiar ni en el vecino».
Considérame para el cargo, Obama;
no soy como Casey ni Hayden; no haría
detenciones secretas ni arbitrarias. Ni instalaría
cárceles en cualquier lugar del mundo.
En Norteamérica ya tenemos 2.2 millones de cautivos
en el sistema doméstico. Y cuesta mucho.
Es el contribuyente quien paga.
¿Es orden que un país se trague a su propios ciudadanos?
Hemos vuelto, creo yo, a preolímpicos tiempos de Saturno.
Somos carceleros de la Humanidad.
Tenemos un Nuevo Orden de argollas y barrotes.
El humanismo que soñaran los Padres Fundadores
lo hemos convertido en evangelio policíaco
y en brutales e inmorales tribunales de inquisidores.
Supe acerca del muchacho iraquí al que obligaron
a fumarse de corrido dos paquetes de tabaco.
Violaban su respiración y sus pulmones.
El tenía las manos atadas y nunca había fumado.
Obama, mira lo que hacen los republicanos
cuando predican democracia; mira el estilo
de McCain. Posiblemente, residuo de venganza
por la memoria de su cautiverio.
Hay soldados que son misericordiosos con los reos;
pero llega el torturador, enaltecido, autorizado,
y se vuelven brutales y ladinos. La jerarquía corrompe,
Obama. En la milicia la obediencia, desalma.
Más honesto que torturar pudiera ser
de plano el exterminio.
Yo supe del niño que agachó la cabeza,
avergonzado por la escena de ver a su padre desnudo,
humillado, cuando las tropas escupían sobre sus genitales.
¿Cómo decir, 'soy cristiano', 'tengo valores' y haber
participado en ésto? ¿Qué diferencia hay entre un matón
de los Carteles Mexicanos y un militar entrenado
en los EE.UU. si ambos secuestran subrepticiamente,
meten en una zanja, para tres días de frío,
al que llaman enemigo, o su blanco,
y vendan sus ojos, lo alimentan de comida en mal estado,
agua con sus gargajos y orines, y les desnudan
para que se vean al defecar unos delante de los otros?
Condolezza, Hayden, Bush-McCain, te dirán que soy blando.
Que no celo los intereses nacionales, pero que mi salario
lo paga el Pentágono. Que seré mediocre, no experto
contra el terrorismo, ¿qué opinas tú, nuevo Presidente?
... yo serviría a tu gobierno, pero depende
en qué estima tengas los derechos humanos...
Denunciaría el hacinamiento, las torturas en los campos
de detención secretos, la existencia de reos sin abogados,
sin contacto alguno con el mundo, en prisiones fantasmales
que la Cruz Roja ignora si son región de vivos
o de muertos. Ni los reos, saben si son almas
en penas, o espectros de sucesivos egos.
Puede que ya no sepan cuántos golpes
le dieron en sus cráneos; o cuántas bofetadas
en el rostro; puede que ya no importe
las congeladas donde se les dio tormento
y se les interrogó hasta escucharse el «Soy culpable»
(tan sólo por ser iraquí y haber nacido).
No sabrán sobre «the simulated drowning»
no sabrán su número entre 10,000 prisioneros.
No sabrá que en Abu Ghraib estuvieron
con los rostros cubiertos, pero desnudos para
que Lynndie England y Charles Graner
He sido el observador sin voto. Voz que les dijo
«Yo me opongo». Un combatiente enemigo que lo sea,
si lo es, pero ante evidencia de supervisiones judiciales.
De lo contrario, sólo nos haremos victimarios.
«Ustedes están fortaleciendo al enemigo».
Es la mucha tortura lo que fanatiza los odios
en tantos pueblos árabes. «Yo me opongo».
Pero el país retiene en cárceles, sin cargos formales
y sin juicio, a quienes les da la gana. Es la forma de justificar
ante la prensa sus corillos histéricos: «Este país está
lleno de gandallas; ya no se puede confiar ni en el vecino».
Considérame para el cargo, Obama;
no soy como Casey ni Hayden; no haría
detenciones secretas ni arbitrarias. Ni instalaría
cárceles en cualquier lugar del mundo.
En Norteamérica ya tenemos 2.2 millones de cautivos
en el sistema doméstico. Y cuesta mucho.
Es el contribuyente quien paga.
¿Es orden que un país se trague a su propios ciudadanos?
Hemos vuelto, creo yo, a preolímpicos tiempos de Saturno.
Somos carceleros de la Humanidad.
Tenemos un Nuevo Orden de argollas y barrotes.
El humanismo que soñaran los Padres Fundadores
lo hemos convertido en evangelio policíaco
y en brutales e inmorales tribunales de inquisidores.
Supe acerca del muchacho iraquí al que obligaron
a fumarse de corrido dos paquetes de tabaco.
Violaban su respiración y sus pulmones.
El tenía las manos atadas y nunca había fumado.
Obama, mira lo que hacen los republicanos
cuando predican democracia; mira el estilo
de McCain. Posiblemente, residuo de venganza
por la memoria de su cautiverio.
Hay soldados que son misericordiosos con los reos;
pero llega el torturador, enaltecido, autorizado,
y se vuelven brutales y ladinos. La jerarquía corrompe,
Obama. En la milicia la obediencia, desalma.
Más honesto que torturar pudiera ser
de plano el exterminio.
Yo supe del niño que agachó la cabeza,
avergonzado por la escena de ver a su padre desnudo,
humillado, cuando las tropas escupían sobre sus genitales.
¿Cómo decir, 'soy cristiano', 'tengo valores' y haber
participado en ésto? ¿Qué diferencia hay entre un matón
de los Carteles Mexicanos y un militar entrenado
en los EE.UU. si ambos secuestran subrepticiamente,
meten en una zanja, para tres días de frío,
al que llaman enemigo, o su blanco,
y vendan sus ojos, lo alimentan de comida en mal estado,
agua con sus gargajos y orines, y les desnudan
para que se vean al defecar unos delante de los otros?
Condolezza, Hayden, Bush-McCain, te dirán que soy blando.
Que no celo los intereses nacionales, pero que mi salario
lo paga el Pentágono. Que seré mediocre, no experto
contra el terrorismo, ¿qué opinas tú, nuevo Presidente?
... yo serviría a tu gobierno, pero depende
en qué estima tengas los derechos humanos...
Denunciaría el hacinamiento, las torturas en los campos
de detención secretos, la existencia de reos sin abogados,
sin contacto alguno con el mundo, en prisiones fantasmales
que la Cruz Roja ignora si son región de vivos
o de muertos. Ni los reos, saben si son almas
en penas, o espectros de sucesivos egos.
Puede que ya no sepan cuántos golpes
le dieron en sus cráneos; o cuántas bofetadas
en el rostro; puede que ya no importe
las congeladas donde se les dio tormento
y se les interrogó hasta escucharse el «Soy culpable»
(tan sólo por ser iraquí y haber nacido).
No sabrán sobre «the simulated drowning»
no sabrán su número entre 10,000 prisioneros.
No sabrá que en Abu Ghraib estuvieron
con los rostros cubiertos, pero desnudos para
que Lynndie England y Charles Graner
festejeran sus lujurias ante ellos.
No sabrán que la CIA designa «blacksites»
a sus cuarteles de tortura sistemática
y que él, el torturado, puede que haya pasado
hasta por 4 de ellos sea en Egipto, Siria,
Jordania o Guantánamo.
No sabrán que, en derecho, que hay necesidad
de un vínculo suyo con participación fáctica
en el conflicto armado. No es cosa de ser
meramente el simpatizante pasivo.
Bush ha autorizado la tortura,
que se 'desaparezcan'
a muchos captores y detenidos. Obama,
he sido observador y he dicho:
«Yo me opongo»,
pero se me desconocido y difamado.
Ahora mismo yo soy el sospechoso.
Se menciona mi nombre de maldito.
06-05-2006 / El libro de la guerra
___
No sabrán que la CIA designa «blacksites»
a sus cuarteles de tortura sistemática
y que él, el torturado, puede que haya pasado
hasta por 4 de ellos sea en Egipto, Siria,
Jordania o Guantánamo.
No sabrán que, en derecho, que hay necesidad
de un vínculo suyo con participación fáctica
en el conflicto armado. No es cosa de ser
meramente el simpatizante pasivo.
Bush ha autorizado la tortura,
que se 'desaparezcan'
a muchos captores y detenidos. Obama,
he sido observador y he dicho:
«Yo me opongo»,
pero se me desconocido y difamado.
Ahora mismo yo soy el sospechoso.
Se menciona mi nombre de maldito.
06-05-2006 / El libro de la guerra
___
Tortura / Notas sobre el magisterio en Pepino desde principios del Siglo XIX al XX / Notas sobre el Magisterio: Parte 2 / Teth / Teth / 2 / Teth / 3 / Teth / en VozAlMundo / Teth / 4 / Teth / 5 / Ven a mí, Moab / Tiferet / Tantralia / Primera parte: Devoción / Prajnaparamita / Etica / Tercera parte: Los tres cuerpos (kayas) del Sambhoga / Leyendas y Cuentos coloraos: Indice / Indice / Colaboraciones / Indice: Cuentos / Convocatoria al Estudio de la Historia Pepiniana / Objetivo estratégico / Vendrá tu hija, la reina de los muertos / ZoomBlog / Las zonas del carácter / La otra mejilla / Homenaje a Martin Heidegger / Teth, mi serpiente / Memorial Days / Berkeley y yo / Indice: Heideggerianas / La guerra de las causas / Dossier de Carlos López Dzur / Cuaderno de amor a Haití / Codornos y coscuros / ¿Para quién es tu canción? / Charkito / Spanish Poets / Literatos de San Sebastián del Pepino / Radiografía: Pepinianidad / Cartas
Tuesday, November 25, 2008
Se llama Manuel
El cóndor perverso almacenaba huellas
de hombres libres, vivía en intercambio
con esbirros y perros. Suya hizo la tarea
de recaudar mandatos de muerte por asesinato.
Vigilaba las aves en su vuelo y llamó
Dirección de Inteligencia a la tortura,
al encarcelamiento, a las persecuciones.
Viajaba a la Argentina, a Bolivia, a Paraguay,
a Venezuela y finalmente, en aras del aplauso
de los homicidas más protervos, volaba al Norte,
se ponía de rodilla ante el oficiante mayor
de lo Siniestro: Norteamérica
[la voz clandestina de todos los ultrajes,
la voz formadora de equipos especiales
para le ejecución de opositores].
Allá iba aquel vendepatria de la DINA
que se aupó como coordinador
del hampa derechista dizque
por la defensa del Occidente cristiano,
espiritual, capitalista, democrático.
Se llama Juan Manuel Guillermo Contreras Sepúlveda,
nacido en Chile; pero es el Cóndor Perverso,
el desalmado, el que se desplaza en sombras
como cuchillero y bebe sangre, vampiro cobarde,
represor que Pinochet impuso. Lo llaman General
y desde 1974, globaliza rencores, ataca nidos
como ave de rapiña, o jacal que, al final,
huye, se esconde en Francia. Es juzgado
en ausencia; es sentenciado y cada vez
se confirma su capacidad para las represiones.
Las sombras de los muertos le persiguen,
las sombras de Orlando Letelier,
Carlos Prats y Bernardo Leighton.
Son miles los lamentos terribles
de 79 asesinados, tus víctimas Cóndor,
tus víctimas, Manuel Contreras.
13-09-2007 / El libro de la guerra
_
Operación Cóndor / Operación Cóndor 2 / Gonzalo Arango: Nadaísmo / Indice: Cuaderno de amor a Haití / Indice: El pueblo en sombras: Pepino / Indice: Heideggerianas / Dossier de Carlos López Dzur / Codornos y coscuros / LA NARANJA / BLOG POLITICO / JournalNova / EmediaGallery / Artículos de Medicina
Monday, November 24, 2008
El patriotismo cinta negra
We seem to have lost not only our sense of ourselves
but of our place in the world: Chuck Norris,
who proclaimed himself the greatest American ever to live:
Thomas S. Winter, Editor
Para preconizar un patriotismo en esta América
que sufre, se lanzó a la arena «Cordell Walker»,
un tremebundo Texas Ranger.
El no es precisamente el Pato Donald.
Es un buenaso gringo que ilusiona...
Sí, ilusión con viejas tropas que hostigaron
a mexicanos y cherokees desde los tiempos
de la República robada y la rebelión de Córdova.
Decía el Juez de la Corte Suprema
Thomas Rusk: «Indios y mexicanos que se vayan».
Pero el icono se siente resentido, él es feo,
tampoco quiere al indio, ni a su genética cherokee.
Como su padre, echa la culpa del pasado
a la genética. Vive in denial.
Denegación histórica, étnica y humana.
En la Frontera Texana los indios atacaban
a colonos blancos. El Patriota Cinta Negra quiere,
por tanto, menospreciar al indio,
reenfantizar su blancura que en su niñez
fue dudada, porque sangre cherokee
le corre por las venas y no puede sacarla.
En su niñez no era atlético ni fuerte,
era tímido y vergonzoso.
La mediocridad la tenía al punto
que lo creyeron tonto.
Vieron a un miserable indígena,
etnia patarajada.
No. Norris es y será un hombre superado:
Norteamérica le destina un futuro brillante.
Será el patriota cinta negra. Será el batallador
al que habría que decirle, como dijera
el jefe lipano Flacco acerca de John Coffee:
«You're bravo too much!»
Antes que dar buenas patadas,
hay que dominar los Colt de 6 tiros
y adorar a Walker, a Benjamin McCulloch
y Bigfoot Wallace y aquí está el Patriota
Cinta Negra, Chuck Norris, hijo
del camionero tan racista,
mecánico borracho.
Un padre que lo ignora.
Porque siempre se ha sentido atormentado
because of his mixed ethnicity,
Norris busca los factores del progreso:
Ya entró por la puerta grande, la Fuerza Aérea,
ya lo vemos en Corea y ha comenzado
a dar sus pasos en Tang Soo Do.
Se vengará en grande, tangsudamente,
con las artes marciales. Dará puños y patadas.
Habrá que tenerle miedo cuando venga
karateando y salga en las portadas
de Black Belt Magazine.
La guerra de Vietnam fue triste.
Allá le mataron a su hermano; allá desaparecen
gente que él ama; pero no por menos,
tiene Chuck sus fantasías de rescate.
Vietnam War POW/MIA es ya su causa
y él sabe vengarse, Ojo por Ojo,
como Octagón que sabe de matanza.
Tiene una meta: Tough Meets Classy.
Se hará respetar a billetazos.
Se unirá a clubes de los Wealthy Republicans
y donará su humildad, si algún residuo
le quedara de cherokee...
Al habla está el Patriota Cinta Negra
con Marinos invasores, con altos mandos
de la Comandancia, ahora es Marino Honorario,
cómplice de códigos de silencio
y va a banquetes en Washington,
Distrito de Columbia.
Ahora es cristiano. Ya se supo que tuvo
fuera del casamiento algunos amoríos
(hasta una hija bastarda); ya se sabe
que su matrimonio se derrumba y una modelo
lo espera en otra cama... pero él es predicador
fiero, cree en las armas y los valores.
Valores tradicionales de familia.
El homosexual que se quede en el closet y no salga.
No al aborto y los romances lésbicos,
Hay que orar en la escuela, orar obligatoriamente
y despreciar a Darwin, la ciencia materialista.
En la escuela pública que se enseñe la Biblia
y la fe, la libertad a la americana, lo nacional
y sus lealtades, aunque haya que imponerlo
con jiu-jitsu y el derecho a comprar
muchos Colts de seis balas y rifles para la caza.
Para preconizar un patriotismo en una
América USA que ha perdido su sendero
y que está dividida como nunca antes,
se necesita un seis-veces campeón
en puño duro, un Karate Kid, un patriota
cinta negra, que tenga principios reaganescos
y lea a lumbreras del conservadorismo
incluyendo a Rush Limbaugh, Thomas Sowell,
Terence Jeffrey, Oliver North, Jerry Falwell,
Pat Buchanan, alguien que nos diga:
Wake up, America! y lo llamen The Hitman,
Hombre del Presidente, Guerrero de la Selva,
The Contender, The Cutter...
«Contrary to popular belief, America is not a democracy,
it is a Chucktatorship».
27-05-2006 / El libro de la guerra
_
Chuck Norris Facts / Indice: CLD / Indice: Cuaderno de amor / Indice: Heideggerianas / JournalNova / EmediaGallery / Artículos de Medicina
* * *
/
De la necesidad de unidad y de orden
a Zeus y Atenea
Tú tienes muchas semillas.
Están en tí, Unidad, fruto sagrado,
huevo del mundo. Acerca de tí se dice
que eres la buena suerte, que tras tu dura cáscara
lo que hay sabroso, nutritivo, afrodisíaco.
Eres lo mejor para la boda, te han deificado,
Ser venerable y sagrado, tabú en ocasiones,
atrayente a menudo: tu norma es poder
y un rayo. Te transformas.
Rayo que parte los huevos.
De Orfeo.
Tú eres la Unidad; pero es en lo interior
que te dispensas, procesándote.
Eres el Organizador por excelencia.
Eres como un ramo de narcisos
que calmas las Furias, introduces lo que amas
al Hades, al viaje ctónico, al tránsito
de la vida y la muerte, donde están tus secretos.
Eres unicidad de lo múltiple, ciencia o arte
de las integraciones. Por algo te llamas Unidad,
y, en tu nombre, de la sangre de Adgistis sale fruto.
Ante lo que te devora, sobrevives, hijo de Cronos;
también te alimentas de creación, destruyes.
Pero, por igual devuelves, instruyes, protejes
cuando y pese a que destruyes y devoras.
Eso es lo maravilloso, tienes etapas
para el reordenamiento. No quieres sólo
prudencia; a la Metis te la tragas.
Tal parece que prefieres guerreros
que te partan el cráneo y surjan.
Defines el conocimiento como lucha.
Por eso amas a Atenea
y castigas a Hera, la reina del Olimpo.
27-05-2004 / El libro de la guerra
__
Indice: Cuaderno de amor a Haití / Indice: El pueblo en sombras: Pepino / Indice: Heideggerianas / Dossier de Carlos López Dzur / Codornos y coscuros / LA NARANJA / BLOG POLITICO
* * *
/
De la lucha por el alimento
Dicen los que meditan en el origen
de las cosas (y de veras, yo lo creo)
que la materia es infinita y fue engendrada
por un huevo y a mí, que todo me parece misterioso,
al razonar lo acepto. Tiene que ser así:
existe un huevo de Brahma o de Nyx todavía.
También pienso que los huevos son el símbolo
del mundo y que alguien se come el mundo
y lo vomita luego. Los huevos han surgido
para ser inmortales y si usted me dice
que igual que el huevo es la granada
(a mí que todo me parece misterioso,
pudiera decir mágico), voy y bendigo
al árbol de granados, en adición
bendigo los huevos y aquel que los recoge,
se los come, los digiere y procesa,
y nos los da de nuevo.
Hoy me levante casi mago, me lavé
la boca con los mitos y me comí una granada;
desayuné unos huevos y bendije
con mi tonto canto, al parecer este texto:
las rojas granadas que en Roma se creyeron
que dan fertilidad, producen afrodisía,
y que las niñas si las ponen en sus senos
se vuelven adorables, se preñan, se enamoran.
En Grecia fueron un ritual previo a las bodas
(hasta fe inspiraba la recogida de granadas
del suelo) y los filósofos antiguos alegaban:
con una granada se conoce el misterio,
la unicidad de lo múltiple; las granadas
son como el huevo del origen,
contienen la vida natural de todo lo que existe.
¡Son tantas las semillas que en su interior
éstas tienen que si las cuentas se vuelven
un narcótico, un estupefaciente!
te integras al misterio, te entumes
en delicias infernales...
¿No apresó el rey del Hades a Perséfone
por sólo darle una granada, no cautivó
su alma al ofrecerle un narciso?
Todo lo que contenga la vida de la naturaleza entera,
si no tiene forma de granada, de narciso o de huevo,
no induce a pensar nada, no te integra al misterio.
Hay dos cosas que me gustan cuando yo desayuno:
meditar con el aroma adormeciente, delicioso,
mi narkissós, que se llama flor del narciso,
y comer del pan que llamo Huevo de Brahma,
o Nyx, huracán de la noche,
pájaro de alas negras que me puja
como un huevo para yo sea erótico,
atrayente, y abanique mis alas de oro.
Sin invocarlos... me siento
como un Dioniso desmembrado;
así que tengo que, como el Phanes
que lo ilumina todo, sentir que alguien
me traga en la Unidad de lo múltiple.
Urjo que medite sobre el huevo,
el narciso y las granadas.
Y esta es mi lucha diaria por el alimento.
07-09-2004 / El libro de la guerra
___
El soldado y la muerte / Poesimistas / ZoomBlog / Las zonas del carácter / La otra mejilla / Homenaje a Martin Heidegger / Teth, mi serpiente / Memorial Days / Berkeley y yo / Indice: Heideggerianas / Pandilla y rivalidad / Dossier de Carlos López Dzur / Cuaderno de amor a Haití / Codornos y coscuros
de las cosas (y de veras, yo lo creo)
que la materia es infinita y fue engendrada
por un huevo y a mí, que todo me parece misterioso,
al razonar lo acepto. Tiene que ser así:
existe un huevo de Brahma o de Nyx todavía.
También pienso que los huevos son el símbolo
del mundo y que alguien se come el mundo
y lo vomita luego. Los huevos han surgido
para ser inmortales y si usted me dice
que igual que el huevo es la granada
(a mí que todo me parece misterioso,
pudiera decir mágico), voy y bendigo
al árbol de granados, en adición
bendigo los huevos y aquel que los recoge,
se los come, los digiere y procesa,
y nos los da de nuevo.
Hoy me levante casi mago, me lavé
la boca con los mitos y me comí una granada;
desayuné unos huevos y bendije
con mi tonto canto, al parecer este texto:
las rojas granadas que en Roma se creyeron
que dan fertilidad, producen afrodisía,
y que las niñas si las ponen en sus senos
se vuelven adorables, se preñan, se enamoran.
En Grecia fueron un ritual previo a las bodas
(hasta fe inspiraba la recogida de granadas
del suelo) y los filósofos antiguos alegaban:
con una granada se conoce el misterio,
la unicidad de lo múltiple; las granadas
son como el huevo del origen,
contienen la vida natural de todo lo que existe.
¡Son tantas las semillas que en su interior
éstas tienen que si las cuentas se vuelven
un narcótico, un estupefaciente!
te integras al misterio, te entumes
en delicias infernales...
¿No apresó el rey del Hades a Perséfone
por sólo darle una granada, no cautivó
su alma al ofrecerle un narciso?
Todo lo que contenga la vida de la naturaleza entera,
si no tiene forma de granada, de narciso o de huevo,
no induce a pensar nada, no te integra al misterio.
Hay dos cosas que me gustan cuando yo desayuno:
meditar con el aroma adormeciente, delicioso,
mi narkissós, que se llama flor del narciso,
y comer del pan que llamo Huevo de Brahma,
o Nyx, huracán de la noche,
pájaro de alas negras que me puja
como un huevo para yo sea erótico,
atrayente, y abanique mis alas de oro.
Sin invocarlos... me siento
como un Dioniso desmembrado;
así que tengo que, como el Phanes
que lo ilumina todo, sentir que alguien
me traga en la Unidad de lo múltiple.
Urjo que medite sobre el huevo,
el narciso y las granadas.
Y esta es mi lucha diaria por el alimento.
07-09-2004 / El libro de la guerra
___
El soldado y la muerte / Poesimistas / ZoomBlog / Las zonas del carácter / La otra mejilla / Homenaje a Martin Heidegger / Teth, mi serpiente / Memorial Days / Berkeley y yo / Indice: Heideggerianas / Pandilla y rivalidad / Dossier de Carlos López Dzur / Cuaderno de amor a Haití / Codornos y coscuros
Sunday, November 23, 2008
El terrorista americano
There are many Muslims in this country who are happy to live in a pluralistic society in which there is no established religion. But it is no less true that there are untold numbers of Muslims within America, working stealthily and systematically to make the U.S. into an Islamic state: Robert Spencer
Voy a decirles quién es un terrorista en los EE.UU.,
aún más, diré muchas cosas que dicen
y cómo operan porque hay expertos
en terror y comunican sus terrorismos en libros.
Difunden lo que alarma, datos que a los bobos
matan de miedo, que se vuelven las crédulas verdades
(aunque ellos mismos no se crean ni un bledo).
El terrorista, por excelencia, el que abunda
en la patria de Washington y Lincoln,
alega que los niños del Islam gritan
«Allahu akbar!»; yo nunca he escuchado
ninguno que murmure éso y me voy a sus barrios
cuando tienen sus ritos y siempre salgo bendecido
por alguno de ellos. Las mujeres islámicas
aquí van a donde placen, no necesitan que nadie
las acompañe; pueden ir con cualquiera
a cualquier lado, al cine, a la plaza, al colegio...
basta que se les respete. Al terrorista puede que ésto
lo moleste, pero, él desea la mentira
de que son cautivas, esclavas del marido,
esclavas de su novio, esclavas de la familia,
el tío, el abuelo, esclavas hasta
de sus propias sombras
y de sus pensamientos.
Los terroristas exaltan la posibilidad de que sea usted
quien a pie juntillas asegure que son tontas,
necias, temerosas, jihadistas de hueso colorado,
una amenaza a los valores de América.
Ellas no son comunes, inyectan
con la sola mirada su pánico.
A menudo las describen como seres vampíricos.
Los terroristas no quieren oírlas, en particular,
si hablan árabe. Tendrían que decirles como si fuera
un conjuro. «English Only». No han aprendido a decir
«Ni cállate». Suelen ser unos tarados monolingües
que santifican el nacionalismo vernacular americano.
Son ellos quienes tienen temor; no saben comunicarse
con el mundo. De los árabes sólo quieren el petróleo
y putas de ojos negros, a falta de una gringa
descarada y escandalosa. Del árabe, empleo,
billetes de jeques y turistas, el derecho a colgarlos
en su tierra, del mismo modo que en la nuestra
[como Ku Klux Klans y Know Nothings] colgamos
a los negros; ciertamente, el terrorista Made-in America
no quiere libertad de expresión o de palabra
para ninguno de ellos. Lo ideal es que no exista
en su nombre tolerancia. Que Norteamérica
anule el derecho al libre credo
porque si algo prueba el Once de Septiembre
es que árabes suicidas nos han declarado guerra.
Jihad es la reeditada palabra bizantina.
Un nuevo persa sacado a la cañona
por las culpas del histórico despojo.
Nuestra santa cruzada de exterminio.
Roma es América en un anacronismo:
ya Roma no mata cristianos ni judíos.
Roma se volvió polvo y pasado
que tragamos a gusto y por capricho.
La consigna de hoy es árabe muerto.
Muerto los perros que se acabe la rabia.
Arabe es ser como indígena nativo en el Viejo Oeste,
más vale muerto el apache que diez Sioux hambrientos.
Por eso los terroristas recomiendan que se suprima
el privilegio que ellos tienen, si es que tolerancia
y diversidad son privilegio, no derechos.
Sí, los terroristas son quienes te dicen que en cada árabe
hay que ver un corruptor, una mujer lastimada,
un hombre que no debe orar en público
ni mandar sus hijos a la escuela de Occidente
porque su profeta es Alá, porque la Ley Islámica
es un código que subyuga y el Corán, un libro subversivo.
Seguramente, el terrorista no ha leído una sola página
del Corán; posiblemente, ni siquiera ha conocido
un amigo que venga del Oriente Medio,
pero él se llama el experto. A su miedo
lo convierte en terrorismo,
el terrorismo de las palabras mentirosas,
el terrorismo de los explotadores.
Por eso el terrorismo es división premeditada,
un pretexto, una nueva forma
de política que suma a las patologías
de unos pocos y, ciertamente,
encumbrados.
09-09-2006 / El libro de la guerra
__
Indice: Cuentos / Convocatoria al Estudio de la Historia Pepiniana / Objetivo estratégico / Vendrá tu hija, la reina de los muertos / ZoomBlog / Las zonas del carácter / La otra mejilla / Homenaje a Martin Heidegger / Teth, mi serpiente / Memorial Days / Berkeley y yo / Indice: Heideggerianas / La guerra de las causas / Dossier de Carlos López Dzur / Cuaderno de amor a Haití / Codornos y coscuros / ¿Para quién es tu canción? / Charkito / Spanish Poets / Literatos de San Sebastián del Pepino
* * *
/
Saturday, November 22, 2008
Ante John Quincy Adams
. . . the American continents, by the free and independent condition which they have assumed and maintain, are henceforth not to be considered as subjects for future colonization by any European Power: James Monroe
No es para sojuzgar al mundo,
no es por causa de opresión
para lo que el Estado nacional ha surgido.
Y usted lo entiende, John, pero no todos
lo entienden. Pocos son y es triste.
Quiero que aconseje al nuevo virginiano,
a él, a James, a Mr. Monroe, porque ha peleado
contra el coloniaje, él se prefigura un varón íntegro.
Un hombre mesurado.
Es indispensable que se mire hacia el Sur
y se vea, no sólo a España y la Florida,
o a Cuba llena de mercenarios y gringos
que la compran por tanto hijodeputa
que la vende, por sacarinocracia,
hay quien no la merece.
Es deseable que entienda a la Luisiana
y no se deje llevar por más territorialismo.
El ama a Francia, pero no todo francés
ama a su hermano, al negro.
Invoco la memoria de James en el Ejército Continental
de Washington, cuando él dio sus batallas.
Lo recuerdo tan juvenil, fiero anti-federalista
en la Convención de Virginia en 1790,
hábil negociador, siempre amigo de Francia:
la Compra de Luisiana es un premio,
o un regalo de Dios a América
por su causa; pero tiene sus peros...
La codicia y la opresión no es cosa de distancias
entre un Imperio y otro, también se sostiene
desde dentro; muy cercanamente,
si el hombre la atesora, corazón adentro.
Entiendo por qué fue jeffersoniano.
Es que ambos son valientes;
Thomas y James parecen haber nacido
como hermanos; tienen algo muy francés
que no es el atropello, luz como revolucionarios.
Del presidente Jefferson recuerdo el año
cuando tropas francesas entraron a New Orleans.
Cuando enviaron contingentes a la isla de Santo Domingo.
Iban a reprimir sublevaciones, a terminar
el derechos de depósitos, derechos navegatorios,
destruirían el comercio que los EE.UU.
pactó para mutuo beneficio.
Monroe y Jefferson se portaron
a la altura necesaria. Los entiendo,
También pienso en usted, John Quincy.
Hoy, que todo el hemisferio está desechando a los amos,
está llegando la era de Nuevas Naciones
y James se preocupa por cosas necesarias
para las patrias nuevas y el mundo;
¿reconocerá él a las nuevas hermanas
que han combatido tanto, desde el 1800?
¿Entenderá a Miranda, a Sucre, a Bolívar?
Es que van más de 20 años y está pensando
sólo en que España debe soltar la Florida.
No todo acaba con la Compra de Luisiana.
A la América Latina no debe tratársela
con miedo de racismo, con voluntad excluyente.
Al buen James, lo escucho en medio
de tan aguda depresión de las finanzas.
Sí, veo cómo debate con esclavistas bravos
del Territorio de Missouri, cómo se inventa
viajes de Buena Voluntad, cómo preconiza
The Era of Good Feelings, pero se lo comen vivo.
El Congreso es amargo y el gobierno es saboteante
y asesino todavía... En su Gabinete está
el sureño John Caldwell Calhoun,
Secretario de Guerra, y mira cómo se conmociona
mi voz al mencionarlo. Es mal augurio
aunque me alegra que seas, Adams,
Secretario de Estado. Calhoun es peligroso,
es el Nulificador, vocero de la esclavitud
y del racismo. El no es como usted, John Adams.
Nos llevará a la guerra y al desastre,
a la crisis constitucional. Vendrá la prueba dolorosa
del Pacto Corrupto, vendrá la Secesión,
con sus olas de muerte, y las mentiras
de los males necesarios, opresores.
La esclavitud, por ejemplo.
No es a Jefferson ni a Madison
a quienes más temo. Es a Calhoun
porque él está junto a James, muy cerca tuyo.
El inyecta veneno.
Y brindará por la ruptura federal,
contra la República soberana y el gobierno surgido.
No es para sojuzgar al mundo,
no es por causa de opresión de unos y otros
para lo que nació el Estado nacional
con Washington y Monroe. Contigo, Adams.
Y usted lo entiende, John, pero no todos
lo entienden. Son pocos y es triste.
28-07-2000 /
__
Objetivo estratégico / Vendrá tu hija, la reina de los muertos / ZoomBlog / Las zonas del carácter / La otra mejilla / Homenaje a Martin Heidegger / Teth, mi serpiente / Memorial Days / Berkeley y yo / Indice: Heideggerianas / La guerra de las causas / Dossier de Carlos López Dzur / Cuaderno de amor a Haití / Codornos y coscuros / ¿Para quién es tu canción? /
* * *
/
Objetivo estratégico
El dominio de esta parte del mundo
es mi pan. Será mi alimento. Y es mío.
Quiero el petróleo del Golfo, el control de abastos
mundiales del subsuelo que sea mi negra sangre.
Usted, soberano de Inglaterra, sea su dueño.
Usted, reina, quédese con la British Petroleum...
yo me conforno con dividir a esos pueblos.
La tarea es mía. Sabré endeblecerlos,
hacerlos pedacitos y me divertirá el gran juego
de la Guerra Perpetua, déjeme éso...
yo haré la doctrina. Me pulirá el arte del Tititiritero,
rivalizándolos unos contra otros,
que las republiquitas se desgasten
aparentemente solas, aunque estoy
detrás como un destino, mordiendo
en sus conjuros, sus apetencias salvajes.
Prometo: No tengo escrúpulos,
aprenderé del idealismo wilsoniano
porque usted tiene un papel, amigo Woodrow.
Usted se meterá con Victoriano Huerta
en México y buscará a Pancho Villa
y con él predicará como un presbiteriano:
Las élites deben ser poderosas, pero también
morales, interesantes, interventoras,
dígale que se invade por su bien.
Woodrow, anote en 14 puntos, que yo quiero
a Coolidge a mi lado, ustedes será nuestros socios
y yo, el Gran Tititiritero, digamos como Napoleón:
Somos la aristocracia del Dominio, digamos
como los Hapbsburgos, artífices de civilizaciones,
únicos aptos, ilustrados, por dios y los hombres
soberanos: traemos el progreso.
Hoy que nazca el proyecto de proyectos:
el Imperio Angloamericano y con él,
como si fuera Roma en sus mejores tiempos,
controlaremos la política en todas partes del mundo.
De la Eurasia hasta el Africa, del Mediterráneo
al Oceano Indico. Diga Amén, amigo Wilson.
Y vea el mapa: «Aquí comenzaremos:
desestabilizando Oriente Medio, pivoteando
sus mares petroleros» y así comenzará
la Nueva Utopía para la que usted,
nos excava un canal en medio del itsmo americano.
Le doy tiempo, usted ponga la cara.
Lo eximo de la guerra, pero prepare todo,
porque el imperio es mundial,
no soportará la existencia de tantos Estados
dizque soberanos, nacionales,
que a la postre son apéndices y naciones sobrantes
donde tendremos el pie
con inversiones. Vaya, vaya a cada rincón
de Hispano América, de México a la Dominicana,
de Cuba a Panamá, vaya junto a John Calvin,
proponga anexiones, fortalezca a sus senadores.
Hágalos partícipes de la Nueva Utopía.
Vamos a manipular demografías,
fronteras, recursos de la tierra
y del mar, vamos inclusive a adueñarnos
de lealtades y atavismos...
Y usted, Woodrow y usted, J. Calvin Coolidge,
son nuestros hombres estratégicos en América.
Nuestros socios preferenciales.
Ahora con pan y vino, comeremos juntos.
23-07-2000 / El libro de la guerra
__
El soldado y la muerte / Poesimistas / ZoomBlog / Las zonas del carácter / La otra mejilla / Homenaje a Martin Heidegger / Teth, mi serpiente / Memorial Days / Berkeley y yo / Indice: Heideggerianas / Pandilla y rivalidad / Dossier de Carlos López Dzur / Cuaderno de amor a Haití / Codornos y coscuros / ¿Para quién es tu canción? /
* * *
/
Subscribe to:
Posts (Atom)